Smothies saludables para salir de tu rutina
Los smothies son la versión más refrescante de los batidos y, con una buena combinación de ingredientes, se pueden convertir en el aliado perfecto para completar tu alimentación saludable.
Dependiendo de las frutas y verduras que se incluyan en él, sus propiedades variarán, al igual que lo harán los beneficios hacia la salud de nuestro organismo.
Para completar el aporte nutricional de este postre o merienda, te recomendamos consumirlo con frutos secos o deshidratados, como pueden ser el coco o los anacardos, ejemplo que verás en la receta y que, además de irresistible, te dará la energía necesaria para seguir con tu día.
Consejos para hacer un smothie saludable y nutritivo
Sin duda, el elemento principal de estos batidos son los ingredientes, que deben ser frescos y variados, no tengas miedo a probar mezclas entre diferentes frutas y verduras.
Para la base y la textura, puedes hacer el batido con agua o con leche, pero un añadido puede ser usar agua infusionada, que le dará ligereza, pero un sabor genial.
Para que los beneficios nutricionales se multipliquen, puedes añadir condimentos conocidos como ‘superfood’ entre los que encontrarás: el cacao puro, las bayas de goji o las semillas de lino y chía.
Ingredientes para un batido de frutos rojos con Anacardos
- 150-200 g de frutos rojos congelados.
- 125 g de yogur de coco sin azúcar (puedes usar otro).
- Un poquito de coco rallado.
- Coco deshidratado Ver Producto
- Anacardos crudos Meditts Ver producto
Trucos para elaborar un smothie de frutos rojos y yogurt irresistible
- Tritura con una batidora los frutos rojos con el yogur, si es posible, con una batidora de vaso para darle la mejor textura.
- Cuando sea una mezcla homogénea, añade un poco de coco rallado y sigue removiendo hasta que se integre perfectamente en la mezcla.
- Pásalo a un bol y pon los toppins. Puedes meterlo al congelador si quieres que quede más compacto y tenga una textura más parecida a la de un helado… ¡será la merienda perfecta si hace calor!
- Ahora sólo queda el paso más importante… ¡saborearlo!